Pogrom
Historicamente los pogrom han sido prácticos métodos que en plena crisis económica permitían, mediante la matanza de una parte de la población, obtener una casa nueva, un terrenito en el campo o liberarse de algunas deudas. Actualmente hay varios pogrom en marcha.
Para participar en un pogrom es importante inscribirse en la oficina correspondiente. Sin embargo deberá estar atento, con el fin de conocer si usted será asesinado o si será el beneficiario de las matanzas. No se preocupe, usted será el beneficiario de las masacres. Esto le permitirá dormir por las noches, ver el amanecer de nuevo e incluso comprar objetos o alimentos con forma de objetos a un precio inferior al de coste. Le advertimos que realizar un pogrom en su ciudad es una molestia que no podemos de ninguna manera permitir, por lo menos mientras no sea absolutamente necesario. Solo serán bienvenidos los pogrom locales si con ellos evitamos que las masas iracundas quemen los palacios de aquellos que gobiernan sobre sus vidas. Entonces si. Usted podrá saquear las tiendas de los coreanos. Pero lo más sensato es situar los pogrom fuera de su alcance visual. Actualmente el pogrom es de escala planetaria. Por lo que podemos afirmar que una lata de sardinas del Lidl a 0,30 centimos equivale a la vida de dos niños anónimos de un ignoto lugar del mundo. Si en una lata hay cuatro sardinas, un niño completo equivale a dos sardinas. Así, cada vez que nos comemos una sardina nos comemos tambien a medio niño. Ciertamente esta moderna forma de antropofagia nos hace disfrutar más de los sabores del mundo sin los inconvenientes de comerse al vecino. Por lo tanto, ahora es posible por segunda vez en la historia participar en un pogrom sin salir de casa.
